martes, 26 de diciembre de 2017

Palabras rizadas en una noche de espera

Y tú. Sí, tú...me miras desde vidrios limpios pero con aval
un panel doble, casi triple y despides los males...
¿o los traes? Con tus látigos de azúcar y de sal,
desde tus caminos eternos de curvas y cristales.
Y descanso mi sombra en tus túneles de margarita y nogal,
tus letras de vida y muerte, tu edén y tus rosales.
Un hachazo de deseo inesperado, loco,
de verbos verdes y rojos a partes iguales,
que atacan desde túneles carmín y de sueños rotos,
y que atienden a la llamada de quimeras jubilosas y ovales.
Una enredadera de espamos de paz y versos ignotos,
que me balancean entre vigilias, amaneceres y corales.
Me aterra la comodidad de esta locura almizclada,
mas no quiero ni perderla ni suicidarme desde mi fantasía alada.

Horas después, casi descanso en tu pecho después de la batalla
y casi echo de menos tus labios de lluvia como rosas que me estallan.

martes, 19 de diciembre de 2017

El astro que reina sobre todos, y la madera

Después de un tiempo sin escribir debido a compromisos varios, aquí va:

Hoy, aunque cuatro paredes de hueso se ciernen sobre mi ser,
me desbordan la fuerza, las ganas y la libertad,
tras dilatados y sesudos senderos de pesar, al fin puedo ver
un deslumbrante astro soberano reinando sobre las vías paralelas
de bosques, rocas y minas donde dejaré el fruto de mis manos encalladas,
y me embriagan el alma tus miradas y la vida que anhelas.
Así, me recibes con tu abrazo acogedor y tu danza certera,
entre risas inocentes, jardines que llenas de arte y laberintos turquesa,
adioses de eras, reencuentros de color inalcanzable, y esperanza duradera.
Me pierdo entre los besos de historia, granos de café y letras de fresa,
mas me encuentro con más acierto que en aquellos montes nostálgicos, y sus caderas;
y en el somier de un ayuno verde me embriagan unas palabras, que ahora pesan
y me empujan a creer que quizá se equivocaba esa vieja y conocida calavera,
me atenaza la sombría duda de aceptar como guía esas palabras rizadas que me besan,
consuman mi acogida y hoy inspiran a mis dedos, que bailan claqué sobre la madera.


sábado, 9 de diciembre de 2017

Jueves nocturno y de contrastes

Y así, entre humos de palabras olvidadas,
Te veo fuerte y oscura entre nubes
De fuego y letras mudas, azules y ahogadas,
Palomas de campos corruptos, oscuridad encerrada
En fósiles transparentes, calurosos y letras amadas,
Torres de magia translúcida, peleas encarnizadas,
Un sustento rojo, suspiros amargos y rimas osadas.
Me engrandezco y se esfuman los gritos de odio,
Los soles que desnudan con su luz y sus miradas
Y frente a mi una encrucijada de lealtades
Lozanas y vetustas, y sus cenizas odiadas,
Por favor guíame con destino firme y certero,
A tu páramo virgen y cierto, y tu hoguera por tu discurso horadada

jueves, 7 de diciembre de 2017

For you, from whom I learned to read between the lines of your name

Blanco y cuadriculado, como el papel que me reta
me hallo enfrente de un campo de trigo que llama
a culpable libertad. Y las palabras que me pides, mi meta.
Unos ojos que imploran unos versos para dar forma
a las aves abstractas que no pueden caber entre la A y la Z.
Has cruzado un océano de vivencias, penas y alegrías
hasta llegar a mi, marcado por un destino divino,
un camino quizá escrito en sangre por las luces
y sombras de la historia y de su irregular camino.
Y así, cuando las sombras me abrazaban, aturdían
y sujetaban, apareciste como un haz de luz fino
exhalando verbos de amor, de azul y de cielo,
olor a infinito, sabor de tierra y coraza de ricino.
Y sin embargo, extrañamente, ahora que la negrura
de mi corazón me suelta a un bosque alegre e infinito,
te añoro y te rescato con paciencia, miedo y mesura.
Y cuando fui aventurero, temerario o loco, ahí brillabas,
mi estrella de esa pasada vigilia triste, aunque pura.

miércoles, 6 de diciembre de 2017

Suspiros de noche, fresas y amor de luna

¿Dónde estás? ¿Cómo puedo alcanzarte?
Apareciste y te deshiciste como un suspiro,
una estrella fugaz negra, un amor de luna.
Por un sueño quebrado huiste y yo ya no respiro.
Quiero hablar con tu seda y tus rosas,
te busco y solo me encuentro desesperado allá donde por ti miro.
En el lugar de siempre, contigo, como nunca.
Haz brincar de nuevo mi corazón de tinta oscura,
atraviésame con tus dagas de pasión amaderada,
no me abandones a una noche que, sin ti,es más que dura.
Huiste de tu deseo como el marinero que,
encadenado a un deber, y ahogado en amargura,
parte sin viento a un mar de ojos
entre luces de falacia y noche de hermosura.
Ayer, vida, noche brillante, y rosas, y madera, y luna.
Hoy amor de manicomio, día negro...y una noche más, que dura.

lunes, 4 de diciembre de 2017

Mundo. Dolor. Una pluma

Hoy, dolor. Y ansiedad. Y desesperación. Y llanto.
Miro al mundo fácilmente desde un agua transparente.
No puedo, pero quiero ayudarte tanto.
Quiero asesinar tu pena infinita.
Quiero deshacer tu enredadera de negro y blanco.
Quiero abrir un atajo en tu vientre de acero.
Quiero llenarte de susurros de amor francos.
Miro al mundo desde un agua transparente.
Un mundo por la ira, desgarrado. Por el odio, insano.
Falsos, canallas y demonios de blancas y verdes manos,
deformáis lo fresco y puro en torcido y cano.
Negro, blanco, dolor y llanto. Tu tumba.
Quiero salvarte, y guiarte...y en mis manos solo una pluma.